Soledad de Doblado es una localidad del estado mexicano de Veracruz de Ignacio de la Llave, México y que es cabecera del municipio del mismo nombre, en la región del Sotavento y tiene una categoría de semiurbano. Debe
su nombre a La Soledad, hacienda a partir de la cual surgió la
actual población y a que en dicha hacienda, el 19 de febrero de 1862, el ministro de
Relaciones Exteriores de México, el liberal Manuel Doblado, firmó los Tratados preliminares de La Soledad.
Historia
En 1783, Diego García Panes, enviado
por el rey de España, Carlos III, levanta el plano de camino de México a
Veracruz. Los ricos comerciantes del consulado de Veracruz prefieren la vía de
Xalapa, mientras que el consulado de México, la ruta de Orizaba-Córdoba. Panes
se inclina por esta última mostrando que la primera lleva 89 leguas mientras
que la segunda solo 76. Pero tiene el problema del cruce del río Jamapa, para
el cual diseña un puente en el paso del Ingeniero, en la actual Soledad de
Doblado. Así describe el tramo de Veracruz a Manlio Fabio y Soledad:
"Demarcada la distancia que hay desde Veracruz hasta Buena Vista y hasta
El Molino, hay 5 Leguas 2100 Varas. Todo el terreno firme llano, de sabana, sin
encontrar rancho ni población alguna. Se llega hasta el río Jamapa, en el paso
del Licenciado. Encontré el río con media vara de profundidad, que es su menor
corriente, manifestando en uno de sus costados, sube hasta 6 varas en su
creciente, pero no arrastra la fuerte ramazón ni arboleda del río La Antigua.
El fondo del río Jamapa es de arena y piedra suelta. Su anchura en la menguante
es de 100 varas y 140 en su creciente y dada la firmeza del terreno en sus dos
costados, proporciona la comodidad para hacer un puente, sin riesgo de su
destrozo"
Es hasta 1812 cuando se construye el
primer puente de Soledad, sobre el río Jamapa. Era de madera, y cada creciente
lo afectaba peligrosamente. Se comisiona a Valeriano Madrazo para edificar un
puente de mampostería, pero este fue suspendido a causa de la guerra y no fue
terminado sino hasta 1835. La actual comarca de Soledad, Manlio Fabio, Paso de
Ovejas, Camarón de Tejeda y demás rancherías desde Tiolinga hasta cerca de
Veracruz, formaban parte de la gran hacienda de Antonio López de Santa Ana.
Entre 1812 y 1815, los españoles que afiliados al Partido Liberal que sostenían
la constitución de 1812, fueron perseguidos. Muchos perdieron la vida y otros
huyeron a América. Entre ellos estaban los hermanos Zurita, Valladolitanos,
ricos empresarios que llegan a comprar tierras de cultivo. Uno de ellos,
Miguel, compró a Santa Ana la hacienda de La Soledad. Los otros dos se
dirigieron a Tabasco.
La hacienda de Zurita comenzó a
poblarse de peones atraídos por las buenas condiciones laborales que ofrecía el
bondadoso y liberal propietario. Miguel Zurita se casó con María Isabel Lagunes
de Mata Cazuela, con quien tuvo muchos descendientes. Al morir, todos sus hijos
heredaron rancherías con extensos campos de cultivo; Juan Zurita fue el
heredero de los que actualmente conforman Soledad.
En 1840, Al incendiarse el templo de
madera de la hacienda, los feligreses le solicitan a Juan Zurita algunas
tierras para construir la iglesia y el cementerio, a lo cual accedió con la
única condición de que sus descendientes fuesen sepultados en ese lugar sin
costo alguno.
Hacia 1850, en la ruta
México-Córdoba-Veracruz, se ampliaban las casas de postas en dónde se alojaban los
carros y las diligencias al llegar la noche. Los carros conducían la carga y
las diligencias a los pasajeros. En la Hacienda de la Soledad, las casas de
postas se encontraban frente al actual parque municipal, y eran administradas
por Bartolo Murguía y Benito García Reyes.
Durante la guerra de reforma, época en la que se
construía el tendido de la vía del ferrocarril mexicano, las obras continuaron
ininterrumpidamente; el año de 1854 se terminó el tramo de México a Guadalupe,
y se activó el de Veracruz a Soledad, promoviendo la afluencia de trabajadores
y empleados que concurrían al poblado. Un grupo de habitantes le solicitó a
Antonio López de Santa Anna en su hacienda Manga de Clavo el empedrado de la
población, para lo cual se trasladó del puerto de Veracruz a una cuadrilla de
presos para realizar los trabajos. Se dice que entre ellos pudo haber
venido Chucho el Roto.
Ante el crecimiento del poblado,
Antonio Villamur, Vera, Rendón y otros, solicitan que el este deje de ser una
congregación para convertirse en municipio. El gobernador Ignacio de la Llave,
expide el decreto 66, el 5 de diciembre de 1861, concediendo el título de
pueblo y cabecera municipal a la congregación de Soledad.
Llegada de los Españoles
Siendo Rey de México, Moctezuma II
desembarcaron en Veracruz los Españoles al mando de Hernán Cortés, pasaron a
Zempoala, a donde fue muy recibido por el cacique que odiaba el Rey Azteca.
Después de pasar por otros muchos pueblos llegaron a México, o sea a la gran
Tenochtitlán, capital de los Aztecas.
Tan pronto como Hernán Cortés y sus
compañeros se adueñaron de todo nuestro país empezaron a mandar oro, plata y
otras muchas a sus tierras, pero como no había trenes y ni siquiera burros,
trajeron los españoles caballos y mulas e hicieron carretas para transportar
las riquezas a Veracruz, y, como también carecían de caminos para que pasaran
las carretas abrieron dos carreteras de Veracruz a México, la carretera que
pasaba por la región de Soledad es el camino de Remojadas, pero en aquel tiempo
no existía puente de hierro, sino uno que hicieron de mampostería que estaba en
Paso Borrego.
En varios puntos del camino había
casas de posta para que cambiaran las mulas y se quedaran los carros y las
diligencias al llegar la noche. Los carros conducían la carga y las diligencias
los pasajeros.
La casa de postas en Soledad se
encontraba al margen derecho del río, pues el antiguo camino que unía a Soledad
con Veracruz no pasaba ni por donde pasa el ferrocarril ni por donde pasan las
carreteras, por eso la primera parada de los carros estuvo al otro lado del
río, así como las casas más antiguas de la población.
Construyeron una casa grande sin
labrar, piso de tierra y techo de zacate. Esta casa sirvió de Templo a una
Virgen de la Soledad que tendría cincuenta centímetros de alto. Fue traída por
los españoles que viajaban en los carros, y los vecinos de las rancherías que
visitaban a la Virgen empezaron a llamar a aquel lugar “La Soledad” nombre que
se le quedó hasta la fecha y que en aquellos tiempos era una ranchería, pero
como ya se dijo, las casas más antiguas y el rústico Templo de la Soledad no se
encontraban en el sitio donde existen hoy la población de Soledad, sino del
otro lado del puente Rojo (tabla).
Pasados algunos años toda esta región
(Soledad, Purga ahora llamado Manlio Fabio Altamirano, Paso de Ovejas, muchas
rancherías desde Tiolinga hasta cerca de Veracruz, y extensos campos) formaban
una gran Hacienda que pertenecía a Don Antonio López de Santa Ana.
Hacienda de Don Miguel Zurita
Cuando en nuestro país estalló la
Guerra de Independencia iniciada por el cura de Dolores Don Miguel Hidalgo, los
disturbios y el descontento invadían España. Napoleón I Emperador de Francia
intervino en los asuntos españoles, el Rey Carlos IV abdicó a favor de su hijo
Fernando VII pero Napoleón colocó en el trono a su propio hermano José.
Los españoles combatieron
heroicamente contra los franceses mientras Fernando VII permanecía en el
destierro. En 1812 las cortes españolas reunidas en cádiz promulgaron una
Constitución con algunos principios liberales pero en marzo de 1814 volvió a su
país Fernando VII y derogó la citada Constitución.
Tirano, viciosos, cruel, todo esto
puede decirse que fue Fernando VII y al convencerse de esto los españoles
cambiaron en odio el cariño que profesaban a su rey cuando estuvo en el
destierro.
Los españoles que afiliados al
partido liberal sostenían la Constitución de 1812 fueron perseguidos. Muchos
perdieron la vida y otros huyeron de inminentes peligros para abandonar España.
Entre ellos se encontraban los hermanos Zurita, originarios de Valladolid,
ricos españoles que decidieron venir a México, a comprar tierras, pues
disponían de un buen capital y dedicarse a la agricultura y a la ganadería. Uno
de ellos llamado Miguel compró a Santa Ana la Hacienda de la Soledad y los otros
dos se fueron a Tabasco.
La hacienda del Sr. Zurita empezó a
poblarse debido a que con frecuencia llegaban y se establecían familias de
distintos lugares, pues el carácter bondadoso y liberal de Don Miguel, la
nobleza de su alma y el buen trato que siempre dio a sus colonos hizo que
vinieran de muchos lugares buscando albergue y trabajo en aquellas hospitalaria
hacienda. El dueño de ésta, Miguel Zurita se casó con una hermosa joven de Mata
Cazuela, llamada María Isabel Lagunes, tuvieron varios hijos de los cuales
quedan muchos descendientes.
La familia Zurita fue dueña del
pueblo y sus alrededores, así como se dice y con razón que los Zurita fueron
los fundadores de Soledad.
Esta hacienda era muy grande y al
morir Don Miguel todos sus hijos heredaron rancherías con extensos campos de
cultivo. A Camila le tocaron unas rancherías rumbo a Paso de Ovejas pero se
dice que Santa Ana le quitó una parte de sus tierras y levantó allí una
elegante residencia. A Juan le tocó lo que hoy es el pueblo de Soledad y varios
ranchos: Melilla, Mata Novillo, Remojadas, el Organo y otros más. Como Don Juan
Zurita era hombre bondadoso y caritativo regaló dotes a varias ancianos pobres
para que hicieran sus chozas.
La población iba en aumento y el
número de sus casas era mayor. La estación de postas ya no estaba del otro lado
del río sino frente del Angulo Suroeste del parque, los primeros
administradores ya en ese lugar fueron Don Bartolo Bujía y Don Benigno García
Reyes.
Como el templo en que estuvo por
muchos años la Virgen de la Soledad era de madera, se incendió, Don Juan cedió
el terreno en que hoy se encuentra el parque y la Iglesia para que construyeran
el templo de mampostería.
Este templo estaba cercado por una
barda de piedra y ese sitio era el cementerio. Se hacía necesario un nuevo
panteón y el mismo señor Juan Zurita, cedió también el terreno en que se
encontraba el cementerio que aún existe junto al río pero ya está clausurado.
El señor Zurita manifestó que todos sus descendientes debían ser sepultados sin
que se les cobrara ni un centavo, pero como no hubo constancia, la voluntad de
Don Juan no fue cumplida en este aspecto.
La primera casa de mampostería que
hubo en Soledad, estaba ubicada en la calle de Aldama entre las calles de
Matamoros y Llave, el frente quedaba hacia el Sur y tenía una especia de
gran patio que llamaban plazuela de los carros
y era la manzana comprendida entre las calles de Aldama, Matamoros, Guerrero y
Llave.
Las carreteras ya no pasaban por Paso
Borrego sino por el puente grande. Ese puente lo mandó a construir el
Presidente Santa Ana pero no era de hierro. La obra del puente grande o del
Gobierno como le llamaban la dirigió el Ing. Valeriano Madrazo. Las calles
fueron empedradas por los presos de Veracruz.
En la plazuela frente al templo donde
hoy se encuentra el parque se hacía el mercado. Las carnicerías estaban en el
lugar en que hoy está la casa de los Yunes. Después se pasaron el mercado y las
carnicerías al lugar que hoy ocupan cediendo también ese terreno Don Juan
Zurita.
Como la población de Soledad iba en
aumento así como las casas de mampostería varios vecinos propusieron la
creación de un pueblo y un Municipio que ya no dependiera de San Diego. Siendo
Sub-Regidor de la Congregación Don Benigno García salieron varios señores
montados en burros a contar el número de habitantes y enviaron a una comisión a
solicitar la creación del Municipio. Esta comisión fue integrada por los
señores Antonio Villamur, Vera, Rendón y algunos otros.
La legislatura estudió el asunto ya
probó la solicitud declarando lo siguiente:
“”Por decreto número 60 de 5 de
diciembre de 1861 se concede a la congregación de soledad título de pueblo y se
le hace cabecera de un municipio”””
En esos días era Gobernador del
Estado el señor Hernández y Hernández. En su honor se le llamó Soledad de
Hernández y Hernández.
Monumentos y lugares de interés
si vas a soledad de doblado no te
puedes perder de ir a su rio en cualquiera de los pasos que gustes desde el
roji o que tal abajo del puente de tablas, claro el puente de tablas no te lo
puedes perder quieres sentir adrenalina pasa por el puente de tablas, tambien
algo importante que no te puedes perder es la iglesia en la cual se firmaron
los tratados de la soledad por don manuel doblado y saliendo de la iglesia una
vuelta al tradicional parque y para refrescarnos un heladito en la neveria del
parque, y para continuar una visita a la estacion del ferrocarril mexicano, que
por las mañanas y noches hay venta de las tradicionales garnachas, gorditas,
con sus huevos hervidos, tamales, enchiladas, chiles rellenos, picadas, etc. la
cual ya es un museo de la ciudad;tampoco te puedes perder los ricos tamales de
masa y elote que hacen las damas catòlicas en la colonia oaxaquilla, y que los
venden a la orilla de la carretera en fin hay tantas cosas que hacer al aire
libre.
Folclore y costumbres
El 2 de febrero se celebra a la
Virgen de la Candelaria, por lo cual se realiza una hermosa feria la cual con
anterioridad se colocaba en el parque de la ciudad, pero debido a su
crecimiento poblacional el parque quedo muy chico por lo que ahora se coloca en
la unidad deportiva, al igual que la feria se coloca una exposicion de ganado
en la entrada de dicha ciudad, el dia 4 de febrero se celebra un baile en el
cual se esmera por traer a alguno de los grupos mas famosos del momento. Asi es
como se celebran las fiestas de la Candelaria, se tiene una reyna la cual es
elegida por votacion de los diferentes bachilleratos que existen, la que mayor
votacion obtenga sera elegida, el dia 2 de febrero se realiza un papaki donde
tanto las personas como los dueños de diferentes negocios salen en carros
alegoricos...
Gastronomía
La comida típica se llama garnacha la
cual es una tortilla frita con una salsa secreta y carne deshebrada, también se
realizan tamales tanto de masa como de elote, así como en las noches los
antojitos son tradicionales, si vas a soledad no te puedes perder las garnachas
y gorditas de la estación, así como las tortas del merendero y por que no los
antojitos de maría, son unos de los lugares donde puedes comer tan rico y aun
bajo costo...
Los
tratados preliminares de La Soledad
Hacia finales de
1861, el gobierno federal ordena suspender los pagos de la deuda exterior a los
países de Inglaterra, España y Francia, quienes rechazan esta medida, y la
toman como pretexto para invadir México. Firman en Londres el 31 de octubre de
1861 una moratoria de pagos contra la República Mexicana en la denominada
Convención de Londres formando así, la alianza Tripartita. El partido
conservador se pone de parte de los franceses, con la idea de derrocar al
gobierno liberal de Juárez. Los Europeos pretendían a su vez, instalar una
colonia y detener la expansión del capitalismo de los Estados Unidos, fuerte
competidor suyo. Las escuadras invasoras llegan a Veracruz en Diciembre de ese
mismo año, y se instalan en las localidades de Orizaba y Xalapa, preparándose
para invadir el país.
La alianza venía
representada por comisionados de los tres respectivos países. Por Inglaterra,
Sir Charles Wyke; por Francia, el conde Alphonse Dubois de Saligny; y por
España, el general Juan Prim, Conde de Reus. Este último, un reconocido liberal
de gran experiencia política y de suma influencia en su país.
Una vez que las fuerzas
europeas ocuparon Veracruz, los tres comisionados estuvieron de acuerdo en
dirigir una proclama al gobierno de Juárez, que enviaron el 10 de enero. En
ella aseguraban que venían a "tender una mano amiga al pueblo a quien la
providencia otorgó todos sus dones, y a quien ven con dolor ir gastando sus
fuerzas y extinguiendo su vitalidad al impulso de guerras civiles y de
perpetuas convulsiones". Reconocían la legitimidad del gobierno
constituido e incitaban al diálogo para llegar a un acuerdo, pero esto
contrastaba con el apartado militar desplegado en las costas mexicanas.
Al notar lo vago
del documento expedido por la alianza tripartita, Manuel Doblado, hábil y sagaz diplomático, y
en ese entonces, ministro de relaciones de México, aprovechó la ocasión para
entrar en negociaciones. Argumentó que, al no estar muy clara la emisión que
traía la delegación tripartita, el gobierno de la república no podía permitir
el avance de las fuerzas extranjeras sin que se establecieran con precisión las
bases generales de las reclamaciones y se hicieran manifiestas las verdaderas
intenciones de los aliados, para que pudieran efectuarse las negociaciones
definitivas. Agregaba Doblado que, una vez establecidos los tratados
preliminares, el gobierno podría, sin comprometer la independencia nacional,
permitir el avance de las tropas aliadas. De esta manera, Doblado comprometía a
los representantes de las potencias aliadas a celebrar un convenio, cuya
ruptura sería interpretada como signo de mala fe.
Firma de los Tratados
de la Soledad
El 19 de febrero de
1862, se firmaron en el pueblo de La Soledad, en el atrio de la parroquia de
nuestra señora de la soledad, los tratados en los cuales las cuatro partes
contratantes acordaban lo siguiente:
· México no
necesitaba del auxilio que le ofrecían los representantes de la alianza.
· Las potencias
aliadas no atentaban contra la independencia, soberanía e integridad del
territorio mexicano.
· Se celebraban
posteriores negociaciones en Orizaba y, mientras se llevaran a cabo, las
fuerzas de las potencias aliadas ocuparían las poblaciones de Córdoba, Orizaba
y Tehuacán.
· En caso de
ruptura de las negociaciones, las fuerzas aliadas desocuparán las poblaciones
mencionadas y volverán a colocarse en la línea de fortificaciones cerca de
Veracruz. Además, los hospitales que tuvieran los aliados quedarán bajo la
salvaguarda de México.
Estos tratados
preliminares, celebrados entre Juan Prim como representante de las
potencias aliadas, y Manuel Doblado,
fueron ratificados por Juárez y por los comisionados de Inglaterra y Francia el
23 de febrero, quedando así con carácter de oficiales.
Después de la firma
de este convenio, las tropas españolas e inglesas se retiran del territorio
nacional. No así las francesas quienes continúan con la invasión. Es indudable
que estos preliminares fueron una obra maestra del distinguido diplomático
Manuel Doblado, y que sientan las bases de la política exterior mexicana, que
parte del principio de la soberanía nacional por encima de cualquier
circunstancia por grave que se considere.
Es hasta 1867 y
siendo entonces presidente municipal Francisco Zurita, llegó a Soledad la
noticia de la muerte de Maximiliano y con ello el fin de la intervención
francesa.
Localización
y demografía
Soledad de Doblado
se encuentra localizado en las coordenadas geográficas 19°02′47″N 96°25′16″O y a una
altitud de 103 metros sobre el nivel del mar. De acuerdo a los resultado del
Censo de Población y Vivienda de 2010 realizado por el Instituto Nacional de
Estadística y Geografía, Soledad de Doblado tiene un total de 12 398
habitantes, de los que 5 923 son hombres y 6 475 son mujeres.
Iglesia de Soledad de Doblado |
Parque de Soledad de Doblado |